Compárate con esta persona

Según la ciencia tus huellas digitales son únicas. Del mismo modo, nadie ha caminado en tus zapatos, nadie ha visto la vida a través de tus ojos, nadie ha sentido lo que siente tu corazón. Y eso es algo bueno, porque es lo que te hace único. Pero entonces, si eres único o única, ¿por qué comparas tu vida con la de los demás?

A lo mejor tú ya estás en un nivel de consciencia más despierto y nunca te comparas con nadie, ¡felicidades! Pero si no estás ahí, probablemente de vez en cuando compares tu vida con la vida de otros. Y eso lo único que hace es ensuciar tu energía y debilitar tu vibración, porque si te comparas con alguien que supuestamente tiene más éxito que tú, es como si te restregaras a ti mismo en la cara que hay algo defectuoso en ti, como si no fueras digno de vivir lo que deseas vivir.

Por otro lado, si te comparas con alguien que la está pasando peor que tú, aunque puede ser un recordatorio de lo buena que es tu vida, corres el riesgo de que la soberbia nuble tus ojos. Y la realidad es que nadie sabe lo que cada ser humano vive en privado y nadie sabe cuál es el camino que cada quién ha recorrido.

Intenta reconocer tu originalidad, tus talentos y tus virtudes, porque ahí radica el valor que le puedes aportar al mundo. Cuando detectes que estás empezando a compararte con los demás, haz una pausa, toma varias respiraciones profundas y vuelve a tu centro. La única persona con quien te debes comprar es contigo. De modo que cada día seas una mejor versión de ti. Una versión más despierta, más amable, más compasiva, más abierta a vivir nuevas experiencias, más dispuesta cuidar y disfrutar tu cuerpo, más pendiente de tu propia mente y de lo que te dices a ti mismo en cada momento.